Esta obra tiene una estética abstracta, llena de colores vibrantes y formas geométricas que evocan la sensación de una ciudad caótica y dinámica. Los colores predominantes, como el azul, amarillo, rojo y negro, están dispuestos en capas que simulan estructuras urbanas o arquitectónicas, como edificios, ventanas y caminos. Las formas curvas y líneas rectas se entrelazan, creando una sensación de movimiento y profundidad, mientras que los colores aportan una energía vibrante.
Acrílico sobre cartulina
39cm x 49cm
Obra única